Sara es la secretaria personal de Dorian. El vampiro más atractivo, vanidoso y superficial del mundo. Y muy a su pesar está totalmente enamorada de él, aunque solo en un universo paralelo su amor podría ser correspondido por tan increíble ser, a pesar de guardar un pequeño secreto que la ha llevado a ser considerada “el mil
Crítica:
Al comenzar el libro, me gustaron mucho Sara y Dorian como protagonistas, parecía que no había elemento paranormal, salvo por las bromas que se gastaban entre humano-vampiro, por lo demás era la relación entre jefe-secretaria. La protagonista está loquita por él, mientras que ella hace de confidente y de empleada, ve día tras día cómo Dorian conquista a otras mujeres que no son ella. A Sara no le hace ni pizca de gracia, pero tiene asumido que su romance es platónico. Él no hace muestras de querer ir más allá de la amistad.
Así que cada día la muchacha se conforma con estar a su lado, mantener la camadería y asumir su no relación.
Viviremos con Sara esta relación imposible junto con una situación límite, y es que no todo iba a ser desamores, los vampiros están bajo amenaza de extinción y éstos no tienen la menor de idea de cómo encajar el golpe, de cómo empezar.
Poseen más sabiduría y experiencia, tienen poderes sobrenaturales, pero a pesar de ello están en desventaja porque no conocen a sus enemigos, podría ser cualquier humano.
Venganza: Vuestra sangre será derramada por aquellos que nos arrebatasteis.
En esta lucha entra en escena Erik, un vampiro que sí que está interesado en Sara, aunque en un primer momento no lo demuestre. Él es más decidido que Dorian, en cuanto intercambia algunas palabras con Sara, sabe que ésta tiene algo especial y que la quiere para sí. Erik intentará conquistar a Sara y hacer que esta olvide completamente a su jefe. Digamos que lo consigue parcialmente, este fragmento resume a la perfección la gran incógnita en la vida de Sara:
Erik era un hombre increíble, casi un sueño, sacado de otra
época pero con las virtudes de esta, y decía estar enamorado de
mí, ni más ni menos, que de mí, y yo, yo solo tenía un pavoroso y
paralizador miedo a defraudarlo, porque ¿qué podía ofrecerle?
Y luego estaba Dorian, que si bien ya no era el centro de mi
vida, ni de lejos, no podía cambiar de la noche a la mañana lo que
sentía por él, y tal vez no podría hacerlo nunca, ¿no sería esa una
forma de engañar a Erik?
Hay dos grandes núcleos en esta historia: el triángulo amoroso y la investigación de la caza de vampiros. Sinceramente, me he enganchado a esta novela por el segundo aspecto. ¿Por qué no me ha gustado el primero?
Sinceramente, la historia podía haber sido mucho mejor evitando el triángulo, quita ritmo a la novela y acaba cargando. Cuando parece que está claro con quién se va a quedar, de repente a la prota se le cruza el cable y vuelve a sus líos mentales.
Además, Dorian pintaba bien al principio, los diálogos entre Sara y él eran chispeantes e ingeniosos, pero llegó un punto de inflexión en el que se veía que la cosa no iba a más por parte de él, y que Dorian se quedaba plano, sin nada que aportar a la historia más que contribuir a la persecución de los humanos. La intensidad del personaje bajó en picado. Y Erik toma el mando de la situación.
Durante más más de ciento y pico páginas, Erik lleva la voz cantante y parece que Sara lo tiene más o menos claro, y acepta la estabilidad que le ofrece él. Pero más adelante habrá más variaciones en la vida de la protagonistas y más cambios en su corazón. Así que volvemos al vaivén como una balsa ante la inmensidad de las olas.
Cuando sus labios aprisionaron los míos, la poca voluntad
que me quedaba quedó cautiva de su aliento, de su lengua, de
toda su esencia comprimida en aquel beso.
Y descubrí, que todo lo que creía saber sobre el amor y la
pasión, era una burda mentira.
La autora introduce mitos y leyendas que se agradecen en la historia, descansando de las fatigosas relaciones de Sara y los intentos vanos de capturar a los malhechores. Me quedo en especial, con los diarios (Tiago-Mamasanta). Ojo que Erik sea vikingo da mucho juego también... y así conoceremos algunas hazañas de este pueblo bárbaro.
En definitiva, una historia entretenida, ágil, divertida, con acción... y dejemos el amor a un lado, porque no me terminó de convencer el triángulo amoroso.
BUENO
Hoooola Martis!!!
ResponderEliminarTiene buena pinta la verdad, pero paso de triángulos amorosos por el momento, me basta con el de Elisabet.
Un besazo!
Si no fuera por el triangulo amoroso me lo apuntaba sin dudarlo la verdad jeejej
ResponderEliminarUn beso :)
La verdad es que no me llama.
ResponderEliminarUn beso.