Reseña: Las herederas de la singer - Ana Lena Rivera

Las herederas de la Singer cuenta la conmovedora historia de las mujeres de una familia ligadas a una máquina de coser que custodió un secreto durante cuatro generaciones. 

El día que la joven Aurora se vio obligada a trabajar en la mina tras el accidente de su padre, se juró a sí misma hacer lo que fuera necesario para salir de aquel infierno.

Un matrimonio sin amor y la máquina de coser Singer de segunda mano que recibe como regalo de bodas le proporcionarán una nueva forma de salir adelante, hasta que un terrible suceso convierte la Singer en la única prueba de la amenaza que la perseguirá toda la vida.

Muchos años después, la complicidad que teje con su biznieta Alba desvelará el secreto que ha planeado sobre las mujeres de su familia.

Como sabéis, si es que habéis leído alguna de mis reseñas de este año, disfruto mucho con las novelas familiares. Novelas como las de Anne Jacobs donde vemos al evolución de abuela, hija y nieta a lo largo de los años y el legado que tienen en común. Por lo general, suelen durarme un suspiro y me enganchan rápido. Por eso, cuando vi en el catálogo de Grijalbo esta novela supe que tenía que ser mía, máxime cuando se desarrolla en Asturias (mi tierrina).

Lástima que no pudiera disfrutarla como quisiera, los escenarios eran todos conocidos para mí y eso era un punto a mi favor. La novedad de crear un libro familiar contextualizado en Asturias (España) durante la Guerra Civil y hasta nuestros días, sumaba muchos puntos positivos, porque para mí era algo nuevo. el problema es que no acabé de entenderme con el estilo de la autora. No me enganchó desde la primera página y, a pesar de mi cabezonería, he leído más de cuatrocientas páginas sin convencerme el estilo.

Si no habéis leído ninguna novela de este estilo, os comento que es típico que en un capítulo haya distintas voces. Es decir, podemos empezar con la abuela luego pasamos a la hija, nieta, biznieta..., todas en distintos momentos de la vida y  se van entrelazando; una suele tener más protagonismo que las otras, y suele pasar que una trama te llame mucho más la atención que las otras. En esta novela, los cambios son bestiales, no te da tiempo a acostumbrarte a una voz que ya está pasando a la otra y después a la siguiente, a veces no hay una página entera con una persona, son párrafos; el lector no acaba de centrarse.

Una cosa que no entiendo fue que al principio deja caer un delito sexual que ha pasado durante dos años en el ámbito familiar, lo deja caer por encima y luego apenas tiene repercusión, no incide en ello. Es como que a veces da la sensación de que suelta información al tuntún pero sin hilar. Me sorprendió bastante con este tema en particular, es algo que marca a la persona y me hubiera gustado que se ahondara más para ver cómo marcó al personaje. Y creo que empatizaríamos más con ella.

Me da rabia hacer una reseña negativa pero sintiéndolo mucho este libro no ha sido para mí, os animo a leer los primeros capítulos para ver si os convence su estilo y le deis una oportunidad. En mi caso, la premisa era buena pero no me ha convencido el desarrollo, no me ha enganchado y no me he identificado o empatizado con ningún personaje. Se nota el trabajo de documentación y el trabajo que hay detrás pero para mí no ha sido suficiente.