Dos millones de dólares le garantizaron a Noah Crawford la mujer más seductora que haya conocido nunca. Iniciar a Delanie Talbot en un sensual mundo de placer los llevó a ambos al borde del abismo una y otra vez. Pero cuando Noah descubre por qué la preciosa e inocente Lanie vendió su cuerpo al mejor postor, tiene que hacer frente a la decisión más difícil que haya tenido que tomar nunca: dejarla libre. Lanie no puede creerse que Noah la dejara ir. ¿No sabe que ambos comparten un vínculo que va más allá del sexo? ¿Una conexión demasiado poderosa como para romperla? Ni siquiera un traicionero enemigo dispuesto a destruir a Noah o el oscuro secreto que atormenta al multimillonario pueden mantenerlos separados. Pero primero ella tiene que demostrarle que él le pertenece, aunque eso signifique arriesgarlo todo por un amor que nunca podrá ser comprado, ni vendido.
CRÍTICA:
El primer libro me gustó mucho por la originalidad que aportaba el contexto en el que la autora comienza la historia, pero el punto negativo que destaqué en este primero, lo recrimino en esta continuación, incluso lo empeora aún más teniendo en cuenta la relación que hay entre los protagonistas.
Y es que Lanie y Noah son inseparables, tras solventar los malos entendidos de un principio, la pareja es prácticamente irrompible, trabajan conjuntamente y arrasarán con todos los que intenten separarles. En esta continuación, vemos una nueva faceta de Noah que hizo su aparición en los últimos capítulos del primer libro, ese protagonista dulce y protector, que ya no la trata como un objeto ni con condescendencia.
"Ese beso era una promesa. Decía que sabíamos que estaríamos juntos, que sentíamos todas las palabras que habíamos pronunciado, que estábamos enamorados y que venceríamos cualquier todo obstáculo que se interpusiera en nuestro camino pese a lo que la vida tuviera preparado para nosotros. Porque por muy retorcida que hubiera sido nuestra situación al empezar, del barro y de la oscuridad la flor roja florecerá"
Por esto, me choca aún más esas expresiones que para mi desgracia abundan en esta historia, la autora mete unas patadas impresionantes con palabras malsonantes, para más inri, las introduce en cualquier situación hasta en una "romántica/sensiblera". Quedando sucia y ordinaria. Se puede describir una escena de sexo sin decir cada poco "chichi, coño, polla, etc" ¡Por favor un poco de estilo y clase! Con esto no quiero decir que no utilice estas palabras nunca, pero que cada dos líneas aparezca una de éstas... es muy pesado, repetitivo y vuelvo a decir que queda muy ordinario.
Quitando esto, y que en algunas ocasiones pensaba que Delanie estaba en celo, la novela es bonita y dulce. Me ha gustado en especial cómo la autora arregla la enemistad entre Noah y su socio ¡perfecta solución (e inesperada)!
La novela narrada por ambos protagonistas y en primera persona, con capítulos cortos y alternando ambas visiones, junto con un estilo simple y con bastantes diálogos, la novela se lee en un suspiro.
"La flor roja florece del barro y de la oscuridad, derrotándolo todo y creciendo hasta la luna llegar.
- El loto escarlata-susurré."
MUY BUENO.
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