El camino al éxito es muy largo y tortuoso, y si no que se lo pregunten a Sofía. Ahora, después de mucho trabajo el ascenso, que está buscando, la lleva a una nueva vida y Londres la espera.
Pero dicha ciudad le traerá, mucho más que logros profesionales. El sexy y descarado Ethan aparecerá en su camino y no solo para enseñarle las ventajas de la vida londinense.
Recuperar lo que les fue arrebatado siempre ha sido su objetivo. Pero ahora, después de que la preciosa Sofía se cruce en su camino y compartan una noche de pasión, puede que su plan para hacerse con lo que siempre ha deseado ya no sea tan prioritario como había sido hasta ahora.
Reseña:
Dulce traición es el debut de Verónika García, tras sus páginas se esconde una historia romántica contemporánea sencilla, directa y pasional.
Cuenta con un sólido argumento que enganchará al lector desde el primer momento, se lee en un suspiro gracias al estilo ágil y que además es cortita -no llega a las doscientas páginas-. La recomendaría para amenizar una lluviosa y aburrida tarde.
Para ser la primera historia de esta autora, está realmente bien, me ha atrapado desde el epílogo y no podía esperar a conocer la reacción de Sofía ante el agravio. Os advierto que el final es demoledor y que contará con una segunda parte -¡cómo nos hacen sufrir las sagas!-.
Antes de ahondar más os presentaré a groso modo la historia, por un lado tenemos a la protagonista: Sofía. Elegida como la mejor trabajadora en su empresa de publicidad, se ve obligada a trasladarse a Londres para conseguir una campaña importante, así que de un día para otro abandona la capital española para ir a la británica. Allí no encontrará ni un momento para adaptarse, el tiempo apremia y la campaña debe salir adelante. La mujer se lo toma como un reto personal, quiere demostrar a todos que su fama la ha ganado con mucho sudor y esfuerzo, trabajará día y noche en el proyecto para destacar.
Casi al momento de pisar Londres conoce a Ethan, Sofía y él no empiezan con buen pie, ella se hace la dura. Pero Ethan no desiste en su empeño y consigue llamar su atención. En poco tiempo los cafés se convierte en una ley sagrada, y durante días quedan a la misma hora y mismo sitio para su dosis de cafeína. La atracción es patente y en poco tiempo la cosa va a más y... saltan chispas.
Ninguno de los dos quiere nada serio, sobre todo ella que se empeña en negar cualquier acto o situación similar a la de una relación. No quiere meterse en complicaciones y solo busca divertirse, pero poco a poco sus convicciones van perdiendo firmeza, y la atracción empieza a convertirse en algo más profundo, por las dos partes.
Para Ethan todo empieza como una especie de plan maquiavélico y le acaba saliendo el tiro por la culata. Os dejo con la intriga.
En cuanto a los puntos que mejoraría son las descripciones, ambientar más el contexto (habitación, gestos de los protagonistas, cafetería, tareas del trabajo...), detallando y precisando mejor las escenas, confiriéndoles más complicidad con el lector.
Por otro lado, aprovecharía que la historia está contada desde los dos puntos de vista para que el lector conozca mejor a los protagonistas. Preocupaciones laborales, sentimentales, infancia... incidir más en ello para que los personajes calen hondo. Por ejemplo, en el caso de Sofía cuando aterriza en Londres aprovechar sus pensamientos para que el lector vea a través de sus ojos la ciudad (el idioma, métodos de trabajo, costumbres inglesas, descripción de algunos lugares típicos y otros desconocidos...( es decir, aprovecharse del medio para enriquecer la novela.
Y por último, cambiaría algunas escenas de cama -que a veces se me hicieron repetitivas- por más escenas entre ellos de otro tipo, donde se conozcan más; de tal forma que cuando Sofía y Ethan empiecen a sentir "algo más" no quede precipitado. En definitiva, la novela se lee en un suspiro pero eché cosas de menos por el camino.
Una historia agridulce, con un final para caerse muerto y un buen argumento que conseguirá mantener al lector en vilo.
BUENO
No hay comentarios :
Publicar un comentario